Mi historia de vida, Cristian Liera Martínez

Mi nombre es Cristian Liera Martínez, tengo 20 años y soy de Morelia, Michoacán.

Mi problema se llama “Necrosis en la cabeza del fémur”, empezó en el 2008 cuando yo tenía la edad de 7 años.

Todo comenzó un día que mi madre Veronica Martinez Piña me llevaba a la escuela, pero no pude caminar, ella pensó que no quería ir a la escuela, sin embargo al dar un paso me caía por lo cual ella se preocupó y me cargo en sus brazos dirigiéndonos a nuestra casa.

El primer diagnóstico: “es un niño chiqueado”.

Posterior a esto fuimos al Seguro Social, donde me atendió el doctor Nicolás Sánchez Cortés, especialista en ortopedia y traumatología, él comentó que solo era un niño chiqueado que buscaba atención, ya que en ese momento era hijo único, mi madre molesta le explicó que yo no era de llamar la atención, el doctor me mandó hacer estudios de rayos X para comprobar qué tenía, a lo que dijo que no tenía nada y que era un exagerado.

Por fin conocimos cuál era mi problema.

Mis padres no conformes con la situación buscaron la opinión de otro especialista, por lo que me llevaron con el doctor José Antonio Torres Calderón, quién me mandó para que me realizaran una placa de cadera, donde se vio que tenía necrosis en la cabeza femoral.

Después de esto, optaron por evitar que por un espacio aproximado de siete meses caminara, para que se detuviera la destrucción de la cabeza del fémur, pero no sirvió de nada ya que se destruyó por completo, a consecuencia de dicha destrucción necesité muletas para poder caminar.

Al cabo de un tiempo, me volvió atender el doctor Nicolás, que recomendó una operación, pero dicha cirugía era muy invasiva debido a que era meter muchos clavos en mi cuerpo, además esto evitaba el crecimiento de mi pierna buena, mis padres dudaron y el doctor les dio tiempo para pensarlo, para así poder programar la operación.

Buscando otra opinión en el extranjero.

Mis padres no estaban conformes y con muchas dudas, por lo que  optaron por contactar una clínica en la ciudad de Garland, Texas, pidieron una cita virtual en la que mostraron todas las radiografías y estudios que hasta en ese momento me habían hecho, el especialista confirmo que era una necrosis en la cabeza femoral y que esa enfermedad se basa en tres fases: la primera es destrucción, después las secuelas y la tercera la regeneración, comentando además que no había motivo para operarme, pues con una adecuada rehabilitación y natación iba a poder caminar.

Al comentarle al doctor Nicolás del Seguro Social lo que nos había dicho el especialista en Garland se molestó, pero mis padres lo único que le pidieron fue que me mandara a rehabilitación y lo hizo, me dio el pase para que entrara al Seguro Social a natación como rehabilitación, sin embargo la rehabilitación que necesitaba era inexistente en dicha institución.

Para encontrarle solución mi padre José Liera Saucedo investigó en el DIF, acudí a una consulta con el ortopedista y éste me mandó a rehabilitación, que consistía en darme masajes y después de cada masaje unas pequeñas descargas eléctricas en la cadera, así duré 6 meses con esta rehabilitación.

Pasado los 6 meses me mandaron a hacer una resonancia magnética, ahí se vio que habían pasado las primeras 2 fases y ya me encontraba en la fase de regeneración, que consiste en la oxigenación de la cabeza del fémur, por lo que el ortopedista me dio de alta por parte del DIF y me dijo que tenía que verlo cada año para ver como iba evolucionando mi problema.

Mis inicios en la natación.

En el Seguro Social empecé en el chapoteadero y después pasé a la alberca más grande, poco a poco me fue gustando, iba mejorando y empezaba a nadar más rápido a pesar de mi problema, destacaba un poco en los grupos que estaba.

Viendo esto mi padre le comentó al entrenador de la selección del Seguro Social de ese momento, Juan Carlos Téllez, que si me podía hacer una prueba para entrar a nadar con la preselección, el entrenador lo dudo pero aceptó, entonces hice la prueba y quedé para nadar con la preselección, y mi vida empezó a cambiar por que ahora entrenaba un poco más y me fue gustando.

Mis primeras competencias formales y la emoción del triunfo.

Entrené mucho para poder ser mejor y tuve mi primera competencia, en la cual solo gané una medalla de participación, estaba súper emocionado; después de mucho trabajo y esfuerzo para superarme llegué a la selección. Asistí a varias competiciones estatales, en las que gané más medallas de tercer lugar que de primero y segundo, le agradezco mucho a mi entrenador Juan Carlos porque él fue quien me enseñó de disciplina, compromiso y dedicación.

Después la selección se separó y practiqué con la entrenadora Karina Sánchez, lo hacíamos en la alberca del Venustiano Carranza y ahí duré solo unos meses, posteriormente hice prueba para entrar nuevamente a la selección del seguro social, esa vez con el entrenador Oscar Neri Rodríguez, la cual pasé y me reintegré a la selección.

Un gran logro, mis participaciones en Paralimpiadas Nacionales.

Mi entrenador me dijo que había eventos para personas con discapacidad, mencionó la Paralimpiada Nacional, lo comenté con mis papás y llevamos mis papeles para poder entrar en la competencia que fue en el Estado de México, ahí me hicieron pruebas con el presidente de asociación sobre sillas de ruedas, también me realizaron preguntas sobre mi discapacidad, finalmente me dijeron que entraría en la categoría S10 (Esta clasificación incluye a las personas con deficiencias físicas, como  la perdida de una mano o una restricción de movimiento en una articulación de cadera).

Mi primera competencia a nivel nacional fue la Paralimpiada Nacional 2015 que se llevó a cabo en la ciudad de Querétaro, yo tenía tan solo 13 años, en esta no gané ninguna medalla pero me motivé mucho, mi compañero Luis Felipe García Escutia ganó 6 medallas de oro y yo estaba super emocionado y contento por él, a lo que me dije “yo quiero ser como él y ganar muchas medallas”.

La segunda competencia fue la Paralimpiada Nacional 2016 en Acapulco, yo tenía 14 años, esta vez me fue muy bien ya que gané 4 medallas de oro en las pruebas de 100 metros dorso, 100 metros libres, 200 metros combinado y 50 metros libre; y una medalla de plata en la prueba de 100 metros mariposa.

En este mismo año hubo otro evento, los Decimosegundos Juegos Nacionales Deportivos Sobre Silla de Ruedas 2016, en la cual participé y gané 1 medalla de oro en los 100 metros dorso, 2 medallas de plata en los 100 metros libres y 50 metros libres, además de una medalla de bronce en 200 metros combinado.

La tercera competencia fue la Paralimpiada Nacional 2017, fue en la ciudad de Colima, yo contaba con 15 años de edad, gané 3 medallas de oro en los 100 metros dorso, 100 metros pecho y 50 metros libres y una de plata en 100 metros libres.

En el mismo año de 2017, me convocaron para ir a concentración en ciudad de México y ver qué posibilidades tenía de ir a una competencia a nivel internacional.

El año 2018 fue un año difícil para mí, por un lado fue el mejor año que tuve compitiendo, pero también el peor debido a que me volvieron a clasificar y no di el puntaje necesario para poder seguir compitiendo en todas las pruebas, solo lo pude hacer en la de 100 metros pecho. 

Competí también en los XLIII Juegos Nacionales Sobre Silla de Ruedas 2018, que se realizaron en la ciudad de Querétaro, tenía 16 años y gané 4 medallas de oro en los 100 metros dorso, 100 metros libres, 200 metros combinado y 100 metros mariposa; una de plata en 50 metros libre y una de bronce en los 100 metros pecho.

Este mismo año, competí en la Paralimpiada Nacional 2018, celebrada en la ciudad de Colima y como solo fui a una prueba, solo gané una medalla de oro en los 100 metros pecho.

En el 2019, fue mi quinta participación en una Paralimpiada y fue en la Paralimpiada Nacional 2019, nuevamente en la ciudad de Colima, tenía 17 años, gané 1 medalla de oro en 100 metros pecho.

En el 2020, no hubo Paralimpiada debido a la pandemia, por lo que dejé de entrenar.

El año 2021 fue un año lleno de sorpresas, ya que solo tuve pocos meses para prepararme y entrenar mucho, mis entrenadores fueron Héctor Mota, Javier Abarca y Oscar Neri, ellos me ayudaron a volver al nivel que tenía anteriormente y este año mi sexta competencia fue la Paralimpiada Nacional 2021, realizada en la ciudad de Cancún, gané una medalla de oro en los 100 metros pecho.

Y bueno, actualmente tengo 20 años y voy a competir en Hermosillo, Sonora en el mes de noviembre, esta será mi última Paralimpiada, estoy muy contento la verdad, ya que he estado entrenando fuerte y espero con ansias ganar.

Mis agradecimientos muy especiales.

Para terminar, quiero agradecer a todas esas personas que estuvieron conmigo en su momento, mis amigos, mis entrenadores, mis familiares, las personas que conocí mediante este hermoso deporte que es la natación; de una manera muy especial a mis padres que me motivaron a seguir adelanté, no se dieron por vencidos conmigo, siempre me apoyan en todo lo que hago y están para mí, en verdad les agradezco todo a ellos, también incluyo a mi hermanito Alejandro que me motiva a seguir mejorando, a ser un buen hermano, a ser un buen ejemplo para él, que me motiva siempre y que está para mí cuando lo necesito.

Agradezco a las personas que me dieron esta bonita oportunidad de dar a conocer un poco mi historia, lo que he logrado gracias a la natación, que en realidad una discapacidad no te hace menos, tienes que ser fuerte y salir adelante, tienes que motivarte cada día hacer mejor, si te caes te levantas, si te vuelves a caer te vuelves a levantar, a veces las caídas son difíciles, pero cuando te levantas vienen esas bonitas recompensas, por que nosotros somos fuertes, no conocemos los límites, siempre queremos más y siempre salimos adelante.

Por ahora llevo un total de 15 medallas de Oro, 5 medallas de plata y 2 de bronce, lo cual me hace sentir orgulloso de mi mismo, pues lo que empezó como una rehabilitación y un salir adelante por mi salud terminó como un gusto por este deporte, en competencias y triunfos logrados.

Espero les guste mi historia, gracias.