“Vivir con un trastorno bipolar no consiste en intentar ser siempre feliz. Se trata de mirar al cielo durante tus noches más oscuras y ver las estrellas brillando sobre ti. Cuanto más oscuro se vuelve tu mundo, más brillan. Son la esperanza interior que te guía hasta que el sol vuelve a salir. Es entonces cuando has robado la victoria a una derrota segura”.- Bryce R. Hostetler, “Calcetines antideslizantes: Mi viaje con el trastorno bipolar” (2020).
Seguramente en más de una ocasión hemos escuchado que con la mayor facilidad del mundo una persona le dice a otra “eres un bipolar”, y en la mayoría de los casos es en tono agresivo y con evidente enojo; es más me atrevo a asegurar que hasta nos ha tocado a alguno de nosotros o recibir el mensaje o decirlo a alguien que nos tiene enfadados o molestos.
Lo anterior es una muestra del uso inadecuado del lenguaje incluyente, de manejar una comunicación no positiva, pero sobre todo el ir creando estereotipos que se van transmitiendo con facilidad y distorsionan la realidad de un trastorno tan especial y delicado como lo es el trastorno bipolar.
El objetivo principal de los días mundiales e internacionales que a lo largo del año se conmemoran, es el de concientizar y sensibilizar a la población sobre este tipo de trastornos y de la discapacidad en general; nosotros por nuestra parte en HIT – Hagamos de la Inclusión un Todo hacemos nuestra aportación con este tipo de escritos, como el del día de hoy en el que hablaremos acerca del trastorno bipolar.
¿Desde cuándo se conmemora el Día Mundial del Trastorno Bipolar?
Fue en el año 2017 cuando la Organización de las Naciones Unidas (ONU) determinó que el día 30 de marzo de todos los años se conmemoraría el Día Mundial del Trastorno Bipolar, seleccionando esta fecha debido a que este día se recuerda el nacimiento de Vincent Van Gogh, quien fue diagnosticado con esta enfermedad mental.
Esta conmemoración tiene como objetivo central el de generar conciencia sobre este trastorno y eliminar el estigma social.
Otro objetivo que se persigue es que el medio laboral los acoja y otorgue la protección necesaria; y que las propias familias tengan mayor conocimiento respecto a cómo actuar ante los episodios de crisis.
¿Qué es el trastorno bipolar?
El trastorno bipolar es una enfermedad mental que afecta a los mecanismos que regulan el estado de ánimo (animostato). Se suele caracterizar por la alternancia de episodios maníacos (altos emocionales) y depresivos (bajos emocionales) separados por períodos de estado de ánimo normal. No obstante, la enfermedad también puede representar sólo episodios maníacos y no sufrir fases depresivas.
Además de la fluctuación de estados de ánimo, también se presentan variaciones en el nivel de energía, de actividad y la concentración.
Cuando se hace presente el episodio de manía, la persona con trastorno bipolar manifiesta un estado de ánimo exaltado o irritable, hiperactividad, verborrea, autoestima elevada y una disminución de la necesidad de dormir.
Este trastorno también se conoce como trastorno maniacodepresivo o depresión maníaca y se puede presentar de manera crónica o episódica, es decir, que ocurre ocasionalmente y a intervalos irregulares.
El trastorno bipolar, conjuntamente con otros trastornos de tipo mental, se identifica como una discapacidad psicosocial.
¿Cuáles son los síntomas del Trastorno Bipolar?
Dependiendo de los episodios que se presenten, es como se pueden identificar los síntomas, los que a continuación mencionamos: Los episodios pueden ser de tres tipos: maníaco, depresivo o mixto; cada episodio ocasiona síntomas que duran entre una o dos semanas o más. Estos episodios conllevan síntomas intensos que duran la mayor parte del día, todos los días, aunque algunas personas presentan síntomas más leves que otras.
- Síntomas del episodio maníaco: Sentirse muy optimista, animado, eufórico, o bien, extremadamente irritable o sensible; actuar y pensar más rápido de lo acostumbrado; no tener necesidad de dormir; hablar muy rápido sobre muchas cosas diferentes; tener un apetito excesivo por la comida, bebida, sexo u otras actividades placenteras; pensar que puede hacer muchas cosas a la vez sin cansarse y sentirse importante, talentoso o poderoso.
• Síntomas del episodio depresivo: Sentirse decaído, triste o ansioso; más lento o inquieto; tener problemas para concentrarse o tomar decisiones; dificultad para conciliar el sueño, despertarse muy temprano o dormir demasiado; hablar despacio, sentir que no hay nada que decir u olvidar muchas cosas; perder el interés en casi todas las actividades, incapacidad para hacer hasta cosas sencillas; sentirse sin esperanza o que no tiene valor y pensar o tratar de quitarse la vida (suicidio).
Tipos de trastorno bipolar.
El trastorno bipolar puede clasificarse en tres tipos, cada uno presentará cambios evidentes en el estado de ánimo, energía y los niveles de actividad.
- Trastorno bipolar tipo I: Presenta episodios maníacos que duran al menos siete días, estos pueden ser de mucha intensidad y el paciente puede requerir hospitalización. Este tipo de trastorno también produce episodios depresivos separados, que suelen durar al menos dos semanas. En este trastorno existe la posibilidad que ocurran episodios de alteraciones en el estado de ánimo con características mixtas simultáneas.
- Trastorno bipolar tipo II: En este tipo de trastorno se presentan patrones de episodios depresivos y episodios hipomaníacos, pero no tan extremos como los del tipo I.
- Trastorno ciclotímico: La persona presenta síntomas hipomaníacos y depresivos persistentes que no son tan intensos ni duran lo suficiente como para calificarlos como episodios. Estos síntomas ocurren al menos dos años en los adultos y un año en las y los niños y adolescentes. Este trastorno puede ocurrir simultáneo a otro tipo de enfermedades mentales tales como la psicosis (alucinaciones y delirios), trastornos de ansiedad y de déficit de atención con hiperactividad; uso nocivo de drogas y alcohol y trastornos de la alimentación.
¿Cómo se diagnostica el Trastorno Bipolar?
El diagnóstico del trastorno bipolar se realiza a través de una evaluación psiquiátrica, un examen físico completo y pruebas médicas para descartar otras enfermedades.
El profesional de la salud mental o psiquiatra es el encargado de diagnosticar el trastorno bipolar con base en los síntomas, el transcurso de la vida, antecedentes familiares y las experiencias de la persona afectada.
Algunos síntomas del trastorno bipolar se parecen al de otras enfermedades, lo que puede desencadenar que los profesionales de la salud den un diagnóstico erróneo. Esto ha derivado que, por varios años, personas vivan con este trastorno y no sepan que lo padecen.
¿Cómo es el tratamiento del Trastorno Bipolar?
El tratamiento para este trastorno se realiza con medicamentos, psicoterapia o una combinación de ambos. Estos tienen que ser de por vida, ya que el padecimiento no cesa por sí solo.
El propósito del tratamiento a base de medicamentos es estabilizar el estado de ánimo manifestado en las fases agudas y prevenir que se vuelvan a presentar.
Con el tratamiento adecuado, las personas con este trastorno se verán beneficiadas, incluso aquellas que han presentado las formas más graves de este padecimiento.
¿Se conocen realmente las causas del trastorno bipolar?
Se desconoce la o las causas exacta del trastorno bipolar, no obstante, estudios han determinado que no solo es una causa, sino la suma de varios factores que contribuyen al desarrollo de este trastorno mental.
- Causas genéticas: Este trastorno puede ser hereditario. No hay un solo gen que pueda causar este trastorno, sino más bien hay muchos involucrados.
- Causas originadas por la estructura y función del cerebro: Algunos estudios han revelado que las personas con este trastorno tienen una estructura y funcionamiento diferente a los que no tienen este trastorno.
¿Cuál es la incidencia a nivel mundial y en nuestro país de personas con trastorno bipolar?
Durante 2019, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó que alrededor de 45 millones de personas en todo el mundo viven con este trastorno.
En uno de los últimos reportes emitido a finales del año pasado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta afección mental es la sexta causa de discapacidad a nivel global, con más de 60 millones de personas que la viven en todo el mundo. Además, las personas con trastorno bipolar tienen un riesgo particular de desarrollar otras enfermedades al mismo tiempo.
En nuestro país, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, se estima que alrededor del 3 por ciento de la población tiene este trastorno mental, es decir cerca de cuatro millones de personas.
Siete frases de personalidades con trastorno bipolar.
Hay frases que por sí solas dicen más que todo un tratado acerca de determinado tema, por eso hemos seleccionado siete frases que nos ayudarán a entender de manera más clara lo que es el trastorno bipolar.
“La bipolaridad te roba lo que eres tú. Puede quitarte el núcleo de tu ser y sustituirlo por algo que es completamente opuesto a lo que realmente eres. Debido a que mi bipolaridad no fue tratada durante mucho tiempo, pasé muchos años mirándome en el espejo y viendo a una persona que no reconocía ni entendía”.- Alyssa Reyans, “Cartas de una madre bipolar”, (2012).
“Pronto la locura te ha desgastado. Es más fácil hacer lo que dice que discutir. De este modo, se apodera de tu mente. Ya no sabes dónde termina y dónde empiezas tú. Crees todo lo que dice. Haces lo que te dice, sin importar lo extremo o absurdo que sea. Si dice que no vales nada, estás de acuerdo”.- Marya Hornbacher, “Madness: Una vida bipolar”, (2008).
“Tales sensaciones” se extienden por mi columna y mi cabeza, un cansancio tan exagerado; tales angustias y desesperaciones; y el alivio y el descanso celestiales; y luego la miseria de nuevo. Creo que nunca nadie fue tan sacudido por el cuerpo como yo”.- Virginia Woolf, “A Writer’s Diary”, (2003, written 1928).
“A veces, ser bipolar puede ser un reto que lo consume todo, que requiere mucha resistencia y aún más valor, así que si vives con esta enfermedad y funcionas, es algo de lo que debes estar orgulloso, no avergonzado”.- Carrie Fisher, “Wishful Drinking”, (2009).
“Podría atravesar el fuego si eso significara hacer realidad mis sueños. Ese es el don que me dio el ser bipolar. Me bendijo con una imaginación elevada, una voluntad de hierro y una creencia inquebrantable en lo imposible”.- AJ Mendez, entrada del blog “Silencio interrumpido”, (2017).
“Tengo la esperanza de que podamos llegar a un lugar donde se elimine el estigma de las personas que pasan por algo solas. Puede ser increíblemente aislante. El trastorno bipolar no tiene que definirte y me niego a permitir que me defina o me controle”.- Mariah Carey, entrevista en la revista People, (2018).
“Hay que trabajar duro cada día. No hay atajos para mejorar. O para cualquier cosa en la vida. Tienes que trabajar absolutamente en ello. Ir a terapia. Toma tus medicamentos. Cuida de ti mismo. No comas ni bebas solo en la oscuridad. Vive tu vida”.- Jenifer Lewis, entrevista con The Washington Post, (2018).
Famosos que viven con trastorno bipolar.
El trastorno bipolar es un trastorno mental bastante frecuente y por ello podemos citar algunas personas relevantes que lo padecen y que viven o vivían con él, que llevan una vida prácticamente normal y han alcanzado el éxito.
Mencionaremos solo sus nombres sin citar la actividad a la que se dedican o dedicaban, pero son tan conocidos que no es necesario agregar otra información:
Mariah Carey, Mel Gibson, Mike Tyson, Catherine Zeta Jones, Edgar Allan Poe, Jimi Hendrix, Robert Downey Jr., Britney Spears, Lady Diana, Jim Carrey, Frank Sinatra, Kurt Cobain y Ernst Hemingway, por citar solo algunos de una lista interminable.
Reflexión final.
Quienes integramos HIT – Hagamos de la Inclusión un Todo hacemos una invitación a todos nuestros lectores para estar pendientes de la manifestación de algún signo o síntoma que indique la presencia de algún trastorno mental, en especial al que nos hemos referido en este artículo el trastorno bipolar.
Otra recomendación que queremos hacerles es la de dejar de utilizar con la mayor simpleza el uso de la palabra bipolar, ya sea para referirnos a una persona que nos cae mal o para alguien a quien queremos agredir o insultar de manera verbal.
Artículo escrito por José Antonio Anguiano Cortés, que se publica en el blog HIT – Hagamos de la Inclusión un Todo bajo la responsabilidad del autor.